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Coche

El motor de las marcas: el coche en la gran pantalla

Es algo típico ver el uso de coches en las películas. A pesar de ello, todo el mundo guarda en su cabeza determinados vehículos que le han dejado huella en la memoria, ya sea porque le gustan o le llaman la atención, por el protagonismo del coche en el filme, por el motivo que lo hace especial, o simplemente, por las andanzas del vehículo a lo largo de la cinta.

Es, igualmente, la oportunidad perfecta para las marcas de dejar su huella en el imaginario del espectador a través de la figura del automóvil. De hecho, existe una ingente transferencia de elementos entre los diversos medios y plataformas, como ocurre en la publicidad convencional. Como ejemplo ilustrativo, véase este spot de la marca Dodge protagonizado por Vin Diesel, relacionado directamente con la saga Fast & Furious:

¿Cuáles son los coches más recordados del cine?

En el momento de contar una historia, hay que tener en cuenta numerosos factores. Entre ellos está el de crear un elemento diferenciador que haga de esa película algo único, o buscar un elemento que se convierta en un icono dentro de la historia. Es aquí cuando un coche puede ganar importancia y, normalmente, esto ocurre cuando el vehículo no se comporta solo como un mero medio de transporte de un personaje, sino que tiene como misión atraer al espectador, llamar su atención; también suele completar la personalidad del protagonista o, incluso, ser el centro en torno al cual se desarrolla el filme.

Es precisamente por esto, por la distinta importancia que puede adquirir un coche dentro de una historia, por la que, en mi opinión, podríamos catalogar tres formas básicas de aparición –grosso modo- y aportación de significado de los coches a una narrativa.

Icono, personaje y protagonista. Tres facetas del automóvil en la gran pantalla

La primera de todas sería aquella en la que el coche es un icono dentro del filme y se le reconoce con facilidad, gracias al diseño que tiene o al vínculo que lo une con algún personaje protagonista. Descartando todas aquellas cintas en las que el coche no tiene más importancia que la de un medio para moverse, es aquí donde podemos ubicar a la mayoría de coches que sí tienen importancia en la película.

Entre algunos de los ejemplos más populares -y clásicos- nos encontraríamos con coches como el Mustang GT 1968 de la película Bullitt, el Ford Falcon Interceptor 1973 de Mad Max, el Mach5 de Speed Racer o el Custom de The Pink Panter Show. También podríamos hablar del Chrysler Imperial Crown de 1966 de la serie The Green Hornet o el Ford Gran Torino de 1976 de la serie Starsky & Hutch. Pero no todo son películas o series americanas… Aquí en España, también tenemos ejemplos como el Seat 1430, siempre presente en las películas de Torrente.

¿Puede tener un vehículo la misma importancia que un actor?

La segunda clasificación se daría cuando el vehículo, por lo característico que es, puede llegar a ganar la misma importancia incluso que los actores. Dicho de otro modo, la película se podría llegar a reconocer no solo por los actores, sino también por el coche, y viceversa. Es decir, el automóvil podría recordar a la película a la que pertenece.

Como ejemplo tenemos el coche que llevan los Cazafantasmas en la película Ghostbusters de 1984. El vehículo -modificado- que llevan es un Cadillac Miller-Meteor de 1959 cuyo uso común y real es el de ambulancia. Otro claro ejemplo lo veríamos con la saga Back to the Future, donde se podría decir que ha ganado más fama el coche conocido como DeLorean, que la propia película. También podría comentaros más ejemplos como el clásico Aston Martin de James Bond, el Mini 1000 de Mr. Bean, la Ford E200 de Scooby-Doo -también conocida como “The Mistery Machine”-, la GMC Vandura G-Series del A-Team o el Chevrolet Impala modificado de Batman, comúnmente conocido como Batmóvil.

Delorean

DeLorean, mítico icono de Back to the Future

Aunque a priori no nos venga a la cabeza, también encontramos un ejemplo de este tipo en el cine español. Hablamos del Citroën 2cv que lleva la novicia protagonista en Sor Citroën.

Para finalizar, tendríamos aquellos vehículos que han sido protagonistas de películas o series, y que se encuentran por encima de los actores principales. En este caso podemos hablar sin duda de todas las películas cuyo protagonista es el pequeño Volkswagen Beetle, como ocurre en el caso de Herbie. Se trata de un coche con comportamientos y sentimientos humanos que consiguió conquistar a todos los espectadores.

Las series tampoco escapan al protagonismo de los coches

En las series también encontramos algo similar, aunque, más que conquistar al espectador, consiguió impresionar por todo lo que era capaz de hacer. Hablamos de Kitt, el coche protagonista de la serie El Coche FantásticoKnight Rider-, el cual era un Pontiac Firebird con una luz delantera roja. Un vehículo que podía hablar y era el gran compañero de Michael Knight -David Hasselhoff-. Otra película, algo menos conocida, pero también con un coche como protagonista, es Christine. La diferencia respecto a las anteriores es que en esta cinta no se trata de un personaje con habilidades increíbles o con una personalidad entrañable, simplemente es un Plymouth Fury diabólico con deseos de venganza.

VolksWagen Beetle

Volkswagen Beetle, conocido protagonista de Herbie

No cabe duda de que nos hemos dejado muchos más coches icónicos como el Porsche 917k de 24 horas de LeMans, o el Dodge Challenger de Vanishing Point, incluso el Nissan Skyline y el Dodge Charger de Fast & Furious. En fin, son innumerables los ejemplos que existen, aquí solo se ha hecho un breve repaso a modo de curiosidad y también sirve como demostración de que un coche puede ser un elemento sumamente importante a la hora de construir una historia.

El coche, ¿elección de guion, financiación o presencia de marca?

Para finalizar, destacar que la elección de un coche, en este caso, se puede deber a diversos factores, ya sea una petición expresa de guion o producción, o por un acuerdo con alguna marca publicitaria -seguramente tengamos que dedicar una entrada exclusiva a hablar del product placement-.

Un caso curioso se dio cuando en el año 2007 se volvieron a realizar una serie de películas de James Bond en las que desaparecía su tradicional Aston Martin en pos de un BMW Z3. Este modelo aún no había sido comercializado, pero gracias al estreno del filme de 007 consiguió vender nueve mil unidades sin estar todavía fabricadas. En la última película que James Bond iba a llevar un BMW, la nombrada marca decidió cambiar el Z3 por el nuevo vehículo que iban a sacar a la venta, el Z8.

Los fines publicitarios son ineludibles. El poder del cine a la hora de persuadir y vender es descomunal. Me gustaría aprovechar esta entrada para destacar este spot de la cadena de supermercados estadounidenses Wal Mart, donde se las apañaron para introducir los vehículos más míticos de la historia del cine. No tiene desperdicio:

Como este, se han dado más casos similares en los que las diferentes marcas han anunciado sus coches a través de una película o serie, como el Dodge Charger en The Dukes of Hazzard, el Nissan Skyline GT-R de Fast & Furious, así como el Chevrolet Camaro amarillo y negro de Transformers.

automóvil transformer

Chevrolet Camaro, presente en la película Transformers

Por tanto, si un medio de transporte tan común como un coche puede llegar a contener tanto significado, sentido y protagonismo en una historia, ¿qué más cosas podrían tenerlo?

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